De Struise Tsjeeses
¿Hablando de cervezas navideñas en marzo? Pues sí, más vale tarde que nunca… en realidad es que no quería escribir el post hasta haber bebido las tres variantes que compré, y por una razón u otra la última no ha caído hasta hoy. Pero volviendo al tema… esta no es una navideña cualquiera, es la De Struise Tsjeeses, la cerveza de Navidad de los belgas De Struise, cervecería ampliamente conocida gracias a la amplia reputación que han alcanzado. Fue fundada hace apenas 10 años por Urbain Coutteau y Philippe Driessens, propietarios de una granja de avestruces en Lo-Reninge que hacían cerveza para sus invitados y que decidieron dedicarse a la cerveza profesionalmente tras observar la buena acogida de sus creaciones. En esta decada se ha convertido en una referencia venerada debido a creaciones como la Pannepot, una belgian strong dark ale a la altura de las más grandes, o la Black Albert, una imperial stout con carácter personal que también se ha ganado todo tipo de aclamaciones.
Hemos probado ambas y algunas De Struise más, pero todo llegará… hablemos hoy de la Tsjeeses. Esta cerveza tiene una historia curiosa, fue bautizada así al parecer en honor a la cogorza que se pilló Urbain una noche probando sus recetas para una cerveza navideña en busca de una que le dejara satisfecho, pues según dicen lo encontraron en un estado de embriaguez considerable y diciendo”Jesus, what a beer!” (nótese que Jesus en inglés se pronuncia cmo si fuera cheeses). De hecho la propia etiqueta es un propio retrato de Urbain ese día, gorrito navideño incluído. No obstante eso no convenció a las autoridades americanas, que consideraron que incitaba al alcoholismo (por los ojos dibujados cómicamente apuntando a direcciones opuestas) e incluso al consumo de marihuana (pues le sale humo por la boca) e incluso la censuraron obligando a ponerle gafas de sol y a borrar ese humillo, tal y como se vé en la foto que ilustra este post.
En cuanto a la cerveza en sí, se presenta con un color ámbar rojizo (tono atípicamente claro para el estilo) turbio y una espuma jabonosa abundante con buena retención.
El aroma evoca las notas típicas de estas cervezas de Navidad belgas, con gran presencia de levadura y azúcar y matices especiados de canela y vainilla.
El sabor es igualmente muy dulce y hereda las notas especiadas, acabando en un trago cálido con ligera presencia de alcohol. Cuerpo medio y carbonatación tal vez ligeramente por encima de la media de este tipo de cervezas.
Con respecto a sus variantes PBA (Port Barrel Aged) y BBA (Bourbon Barrel Aged), tal vez sea por mi paladar inexperto pero la PBA no me ha aportado grandes diferencias con respecto a la original. No sé si podría distinguirla en una cata a ciegas, probablemente no. La BBA tal vez sí me haya permitido apreciar cierta diferencia, con un sabor acaramelado ligeramente más intenso.
RESUMEN: una navideña al más puro estilo belga, dulzona y especiada.
jajajaja no conocía la historia de la etiqueta y el nombre de la birra, bonito debía estar el colega. Saludos
LikeLike
Desde luego es una historia curiosa XDDDDD
Y lo de EEUU con la censura es acojonante oye.
¡Un saludo!
LikeLike